Cuando Lacan J.(1901-1981) dice que en la paranoia “hay
Otro” diferencia éste concepto del “pequeño otro” que representa al prójimo que
nos rodea. De ahí que el Gran Otro presente y existente para el paranoico, se
convierte no en una supuesta mirada vigiladora sino en una mirada real.
En Krishnamurti J.(1895-1986) la similitud con el pensamiento
de Lacan es que habla del “observador” quien cumple su función vigilando al
“observado”, o sea:uno mismo. Se sostiene una creencia en donde el observado
crea al observador, así se divide y entra en la estructuración paranoide, o
sea, la división de sí mismo, el autoengaño.
En síntesis, Lacan dice: “No hay Otro, ni Otro del
Otro”
Krishnamurti dice: “No existe el observador ni el
observado, por lo tanto no hay ninguna posibilidad de separación”
Coinciden contemporáneamente en la misma conclusión a
miles de kilómetros de distancia entre sí y en distintos hemisferios.